La Colección Lancia fue creada por Enrico Masala, quien consiguió para su ubicación una antigua nave de la Fábrica Lancia de San Paolo. Logró reunir los coches en el lugar donde la mayoría fueron fabricados. Su empeño fue lograr constituirla como Museo Lancia, porque así gozaría de las bonificaciones de la Administración y además aumentaría su categoría. A todo esto el Grupo Fiat se negó, probablemente porque si se blindaba la sede por ser un Museo, eso iría en contra de sus intereses inmobiliarios (léase echar abajo el Stabilimento y vender los terrenos). Como así ha sido. Se perdió la oportunidad con una gran falta de respeto por la Historia. Os dejo este vídeo que rodé en 2008. Masala al volante de uno de los coches de la Collezione, un indestructible Lancia Artena.
En cuanto a los Stabilimenti, como dije en su día, lo que no hicieron las bombas de la Segunda Guerra Mundial lo hicieron el Grupo Fiat y el Ayuntamiento de Turín. Enero de 2011, poco antes de la demolición. Este edificio principal, que albergaba un despacho intacto de Vincenzo Lancia, prometieron que se salvaría, pero mintieron y lo derribaron.